Como nos dice nuestro instructor en todas las clases: un arma blanca es tan peligrosa que siempre nos van a cortar, siempre nos van a pinchar. Y para poder sobrevivir de un ataque de arma blanca se tienen que juntar dos cosas, la primera es que tengamos muchísima suerte y la segunda es que nuestro nivel de destreza sea altísimo.
Enfrentarse a un arma blanca es la última opción y tenemos que ser conscientes que nuestras posibilidades de no resultar heridos de gravedad ó incluso morir son mínimas.
Krav Maga Cantabria: ¡no queremos humo, nos tomamos muy en serio nuestra formación!
